Acción Nacional y su aniversario 86

en la medi- da que parte de la militancia y las dirigencias del PAN, fueron perdiendo la brújula, México entró en retroceso.
Tomás Trueba Gracián
En un no muy lejano septiembre de 1939 nace una gran organización ciudadana, una organización humanista con ciudadanos dispuestos a luchar y a dar todo por el Bien Común. Una organización cuya finalidad era instalar la democracia, los valores éticos en la vida pública, promover los derechos y libertades de los mexicanos. Buscaba terminar con la simulación y el caudillismo, su mira estaba basada en el respeto a la dignidad de la persona humana, no más uso y abuso del ciudadano, los mexicanos no eran masas, eran personas libres.
No puedo entender la vida libre y la democracia en México sin la presencia de ese Partido humanista que buscó mover las almas, crear ciudadanía, capacitar a las personas que se sumaban a tan digna institución en la vida ética de la política, nos decían los fundadores que la política no era sucia, que la política era un asunto de familias. Así nació y así creció el PAN, hasta que se perdió la brújula, hasta que el faro de los principios de doctrina lo fueron apagando los apetitos personales y el ansia del Poder.
Y podrá sonar muy presuntuoso, pero en la medida que parte de la militancia y las dirigencias del PAN, fueron perdiendo la brújula, México entró en retroceso. Hoy tenemos un México sin instituciones, a Don Manuel Gómez Morín, se le llamó el creador de instituciones, hoy México está en franca decadencia de una vida libre, democrática, el PAN está por el estilo. Hoy en México se atenta contra la dignidad de las personas, en el PAN hacen lo mismo a su interior. Qué tiempos aquellos de esos panistas y sus dirigentes que eran escuchados, respetados, que “llenaban las pantallas de noticieros”.
Se dejó de escuchar al ciudadano, se dejó de lado la capacitación de los militantes y de los ciudadanos, se dejó todo en manos de unos cuantos que no eran lo más representativo del pensamiento y la Doctrina del PAN. En el mismo interior del PAN propiamente se acabó la visión solidaria, lógico en la vida pública de México todo eso se perdió y dejamos en manos del populismo la vida nacional. No fuimos capaces de llevar a la vida pública el verdadero espíritu solidario y subsidiario que México necesitaba y necesita y eso favoreció el abuso de programas sociales que nada tienen que ver con el desarrollo del ser humano.
Muchos de los panistas o ciudadanos externos que lograron cargos de elección popular les fallaron a sus electores, les ganó el ansia de Poder y dejaron a un lado la ética política. Dirigentes que solo vieron su beneficio y repartían cargos como barajitas para controlar todo o peor aún se impusieron como candidatos, un ejemplo, el error de Anaya del 2018. Eso favoreció que Peña Nieto hiciera todo para que AMLO llegara a la Presidencia, persiguió y difamó a Ricardo todo el tiempo. Otro gallo habría cantado con otra u otro candidato, pero eso es historia, lo malo es que
no se aprendió de esa derrota y la crisis del PAN por apetitos personales se profundizó.
México necesita a una PAN ético, fuerte, democrático, libre y con su propia identidad.