El sábado 13 de septiembre de 2025, el Ejército israelí llevó a cabo un ataque aéreo que destruyó la torre residencial Al Nour, ubicada en el barrio Tel al Hawa de Gaza. Según el portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), el edificio albergaba infraestructura militar de Hamas utilizada para ejecutar ataques contra sus fuerzas. El ataque se produjo minutos después de que las autoridades israelíes emitieran una orden de evacuación para los residentes, lo que dejó a cientos de civiles sin hogar y agravó la ya crítica situación humanitaria en la región.
Este ataque se enmarca en una serie de bombardeos que han destruido al menos seis torres residenciales en Gaza en los últimos días, lo que ha generado una creciente preocupación por la seguridad de los civiles. Organizaciones humanitarias denuncian que estas acciones constituyen desplazamientos forzosos y violaciones al derecho internacional humanitario.
A pesar de las advertencias de evacuación, muchos residentes permanecen en la ciudad debido a la falta de recursos y la escasa disponibilidad de refugios seguros. Se estima que más de 100,000 personas han huido de Gaza, aunque la situación sigue siendo crítica.
La comunidad internacional ha expresado su alarma por la escalada del conflicto y la grave crisis humanitaria que afecta a la población civil en Gaza. Organizaciones como la ONU y la Cruz Roja han instado a ambas partes a cesar las hostilidades y permitir el acceso humanitario sin restricciones. Sin embargo, hasta el momento, no se ha logrado un alto el fuego duradero.
Este ataque a la torre Al Nour es solo uno de los muchos incidentes que han marcado la intensificación del conflicto en Gaza, donde la población civil continúa pagando el precio más alto. La destrucción de infraestructuras civiles, la escasez de suministros básicos y el desplazamiento forzoso de miles de personas son solo algunos de los desafíos que enfrenta la población de Gaza en estos momentos.